Es una ceremonia agradable de ver en la experiencia de disfrutar de un partido NBA, pero ciertamente confusa. Adscrito a la generación de oro, una lesión le apartó del conjunto que ganó el Mundial júnior en 1999. Estaba en Lisboa, pero en la grada. Y una lesión (van cuatro) le sacó de la selección en el último amistoso antes del Mundial de 2010. Estuvo en Estambul, pero para consuelo tras la eliminación ante Serbia. En medio de todo esto, Ricky Rubio: MVP del Mundial, fichado este verano por Phoenix, base titular y una de las principales razones para el cambio de cara del equipo que ahora dirige Monty Williams.
El medio antes citado logró verificar que al intentar comprar una camiseta personalizada con la frase “FreeHongKong” el mensaje de autocompletado se mostraba de la siguiente manera: “No podemos personalizar este elemento con el texto que ha ingresado. James fue elegido para su sexto All-Star consecutivo, convirtiéndose en el primer jugador en sobrepasar en 3 ocasiones los 2 millones y medio de votos de los aficionados. Está el listón por las nubes con estos Warriors de dibujos animados, con el todopoderoso LeBron James o con tipos como James Harden, Anthony Davis, Giannis Antetokounmpo o Joel Embiid (entre tantos genios) que más bien parecen superhéroes. Es uno de los tipos de moda, promedia 28,3 puntos y 10,3 rebotes al lado de Anthony Davis en los ilusionantes Pelicans.
Especialmente LeBron James y Anthony Davis que recuperaron el fuego en la mirada y demostraron que no se habían olvidado de su promesa y no se detendrían hasta cumplirla. Este jueves, LeBron James no quiso quedarse atrás. Esta mejoría fue reconocida al ser elegido para disputar el All-Star Game de 2006 en Houston como reserva, siendo el tercer jugador en la historia de los Raptors en lograr este hito, por detrás de Vince Carter y Antonio Davis. Así se convirtió en el cuarto jugador español -tras Fernando Martín, Pau Gasol y Raúl López- en hacer realidad el sueño americano. No cambiaría demasiado su realidad personal, pues seguiría observando el juego desde el sótano del banquillo, pero el atractivo colectivo era incomparable.
Él ya rozó un título (2012), incluso podría pelear por el de esta temporada, pues la lesión se ha quedadó en esguince -un mes de baja, mejorando la expectativa-. No es un jugador maldito, pues su palmarés incluye un botín que deslumbra: oro mundial, tres podios olímpicos y cuatro continentales (un título entre ellos). Debido a ello Saporta decidió incorporar al plano técnico a la que se convertiría con los años en una de las máximas figuras del baloncesto mundial, Pedro Ferrándiz. El gran crecimiento que experimentaba el baloncesto se vio particularmente reflejado en España en la década de los años ochenta, donde se vivieron los años de mayor rivalidad.